La Libia de Gaddafi, una obra frustrada que se esbozó en su "Libro Verde"
Entre
finales de los años 70 y mediados de los 80, Libia -la antigua colonia
italiana- era un elemento clave en
lo que en la dialéctica geopolítica se dio en llamar "Al Watan al Arabi"(
la patria árabe) y, por ello, jugaba un papel de peso en el panorama pan
arábigo.
El
coronel Gaddafi admiraba al coronel Nasser y ambicionaba aglutinar tras de sí
el pensamiento político del mundo árabe unido. El líder de la revolución de la Gran Yamahiriya Árabe Libia Popular Socialista escribió un
libro llamado a iluminar a sus seguidores. En un texto que seguía los pasos de las memorias de antiguos militares, de textos
fundacionales como "Fi Sabil al Baath" ( en el
camino del renacimiento) del filósofo sirio Michel Aflak, de argumentarios
políticos como "La historia me absolverá" de
Fidel Castro (que contribuiría a su indulto por parte del presidente Batista
que luego él mismo derrocó), Muammar El Gaddafi escribió "Al Kitab al
Ajdar" ( el libroVerde), su ideario y su legado para generaciones
venideras.
Con
luces y sombras, este líder beduino había sido vinculado con el atentado de Lockerbie donde murieron más de 250 personas ( en 2002 Libia admitió que había estado involucrada en la preparación de la bomba), que montaba su jaima (tienda de campaña
árabe) en las esplanadas de las residencias presidenciales a las que le
invitaban y que se preciaba de sus ideas progresistas frente a la mujer: viajaba
rodeado de una nutrida guardia armada de seguridad personal formada por
mujeres, que la prensa occidental bautizó como "la Guardia de las Amazonas",
pero que en realidad se denominaban ar Rabihat az-Zauriyat (monjas
de la revolución). Luego vendrían algunas deserciones y acusaciones públicas de
abusos que llenaron páginas en algunos medios. El se había opuesto a la "primavera árabe" y con el tiempo la opinión pública y su pasado acabaron alcanzándole, hasta que fue asesinado en 2011 por unos milicianos rebeldes de Misrata. Acabó un poco al estilo de Benito Mussolini, siendo vilipendiado por la población incluso cuando ya era cadáver. Así fue el lamentable final de Al Ghaed az-Zaura ( el guía de la revolución) libio.
Les
dejo aquí un par de artículos que les sumergirán en aquella época: Un artículo
que escribí para "El Imparcial" y una entrevista que publiqué en la
revista "Tiempo", del Grupo Zeta.
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