¨El eurocomunismo es un híbrido que no lleva al comunismo" , decían en el PCE (marxista-leninista)

 La transición española vio cómo muchos partidos trataban de ganar fuerza. A río revuelto, ganancia de pescadores. Uno de los partidos radicales que entrevisté fue el Partico Comunista ( marxista-leninista), que se declaraba parte del FRAP ( Frente de Resistencia Antifascista y Patriota, cuyo símbolo era una mano sujetando una metralleta sobre el fonde de la piel de toro teñida con la bandera republicana). El FRAP cometió crímenes de sangre (mataron a seis personas, entre guardiaciviles y miembrosos de la policía armada). En el 1976 hubo protstas entre sus militantes por las acciones violentas y acabó disolviéndose en 1978.

Pablo Mayoral Rueda, era entonces líder del PCE (m-l), y además se postulaba como alcalde de Madrid. La historia y las urnas demostraron que  fue demasiado optimista respecto a su futuro político. 



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