El secreto mejor guardado de Galicia: Lugo tiene 23 siglos de historia y ni una arruga

Fotos: Juan Girón Roger.
Fue fundada por los romanos, en particular por Paulo Fabio Máximo en representación del emperador Augusto, en el año 25 antes de Jesucristo con el nombre de Lucus Augusti.Hoy, Lugo, la ciudad más antigua de Galicia, cuenta con la única muralla romana con su contorno íntegro que queda en todo el mundo. Ésta rodea el centro histórico de la ciudad y la divide en intramuros y extramuros.
La ciudad rezuma historia, y la huella romana se deja sentir en cada rincón de la ciudad. Una piscina romana por aquí, un puente romano junto al protegidísimo río Miño, las ruinas de un oppidum (asentamiento) romano con la sala de estar, varias habitaciones y hasta un templo al dios Mitra, divinidad persa, al que el dueño de la casa debía ser adepto, dela que no queda ningún templo con ubicación tan occidental en el planeta. La columna votiva de esa deidad está intacta, ya que fue enterrada para evitar el pillaje y la destrucción. Se trataba de un dios protector de las familias al que había que sacrificar animales que luego los seguidores se comían en ágapes que formaban parte del ritual.
A poca distancia, la catedral -otra joya arquitectónica muy bien conservada- y el museo provincial, que es un tesoro en sí mismo, lleno de piezas que se remontan a la época romana tales como construcciones funerarias, mosaicos y colecciones de monedas y objetos más recientes como colecciones de joyas de azabache, armas blancas antiguas y relojes de bolsillo, por lo que se justifican unas horas más de visita a la catedral y al museo.
Las murallas de Lugo fueron declaradas Monumento Nacional para frenar el deterioro al que se veía amenazada su estructura debido a la construcción de casas adosadas desde el siglo XVIII.Desde el año 2000 fueron reconocidas como patrimonio de la Humanidad ( parece que costó convencer a la UNESCO o que se iniciaron tarde las gestiones para su inclusión) y en 2015 la hermanaron con la muralla china. No se pierdan un evocador paseo a lo largo de todo el contorno de las murallas lucenses (algo más de dos kilómetros de extensión), siguiendo los pasos que muchos habrán dado antes que ustedes en todo este tiempo.
Lugo se muestra como el secreto mejor guardado de Galicia, lleno de historia, bellas cosas que admirar, buena gastronomía, y gente amable que te dice con retranca galaica "no vaya usted a desvelar el secreto, que después esto se nos llena de gente".

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