PALESTINA: TIEMPO PARA LA PAZ , TIEMPO PARA LA GUERRA

 La revolución palestina ha conocido muchas fases desde 1948. Del primer secuestro aéreo ( hijack) organizado por Georges Habbash del Frente Popular para la Liberación de Palestina, hasta Septiembre Negro en los Juegos Olímpicos de Munich en el 1972, pasando por las distintas intifadas y las interminables negociaciones que arrancaron de Camp David ( con Egipto, EEUU e Israel sentados a la misma mesa). Sin olvidar el temido Abú Nidal, del que se dijo que, más que para la causa palestina,  trabajaba como mercenario para distintos países árabes. 

En 1980 tuve ocasión de entrar en contacto con su causa. Habbash, el guerrillero Bassam Abú Sharif ( que de consejero de Arafat pasaría en los 90 a firmar con el ex espía israelí  Uzi Mahnaimi el polémico libro "Los mejores enemigos");   Abú Saleh y su Al Assifa, y el referente Abú Ammar -Yasser Arafat- que yo encontraría casi  una década más tarde en Madrid. 

Se consideraban fedayín ( combatientes) y tenían sus shuhada' ( mártires). Había la Media Luna Roja y ACNUR que velaba por ellos. Pero llevaban a cuestas -hoy el panorama no ha cambiado- el peso de ese adagio árabe que asegura que "dos árabes sólo pueden ponerse de acuerdo en una cosa: estar en desacuerdo"). Por otra parte, el mundo árabe los apoyo pero desde la distancia y como instrumento para otros fines distintos al futuro de Palestina. Decían "Zaura hatta Nasser"( revolución hasta la victoria") y otros repetína "Sana'ud" (volveremos) con la vista vuelta hacia los territorios ocupados por Israel.  Cuando los visité en sus trincheras libanesas de Beirut, Sidón y Tiro y visité los campamentos de Sabra y Chatila ( llenos de mujeres y menores que serían masacrados por el comandante libanés Saad Haddad a las órdenes de Israel) la resolución por recobrar el territorio usurpado parecía más palpable que en la actualidad. 

Les dejó la serie de reportajes quer publiqué en el diario "El Imparcial" en 1980, tras un viaje muy intenso y revelador.