Con los "Caprichos" de José María Gallego, ni los clásicos se libran de la feroz caricatura

Fotos: Juan Girón Roger.

Los dibujos de José María Gallego -que en el dúo Gallego & Rey –José María Gallego era el ilustrador y Julio Rey, el guionista- nos deleitó tantas veces desde 1981, en las páginas de Diario 16, El País, El Mundo, Paris Match, El Jueves, Marca o incluso Tele 5- pueden contemplarse en el Museo de la Imprenta Municipal de Madrid.

Escultura metálica que rinde homenaje a los serenos de Madrid, justo delante del inmueble de la Imprenta Municipal de la capital.

Esta muestra se refiere a la obra gráfica que acompañó a distintas ediciones literarias publicadas por la editorial Reino de Cordelia , tales como “Ladrones de Tinta”, de Alfonso Mateo-Sagasta; “Luces de Bohemia”, de Ramón María del Valle-Inclán, “Las minas del rey Salomón”, de Henry Rider Haggard; o “Cyrano de Bergerac”, de Edmond Rostand.

Todas esas ilustraciones conforman una serie de dibujos, muy cuidados en su expresividad y relevancia histórica, que merecen el desvío al museo.

Nacido en Madrid en 1955, Gallego siempre ha buscado deformar la realidad para resaltar algún aspecto de la misma. Su intensa actividad como dibujante de viñetas no le impidió adentrarse en la ilustración de libros en 2010: “El motín de Muti Guj”, de Rudyard Kipling, “Momentos poco estelares de la humanidad”, de Toni Mata, en 2013 y ya en 2016, ilustra “La isla del tesoro”, de Robert Louis Stevenson, que ganaría un premio del Ministerio de Cultura.

Las cuatro obras citadas más arriba son la culminación de su trabajo como ilustrador literario. Su imaginación y el rigor histórico van de la mano en estas imágenes que despiertan el interés del lector y el apetito por ir más allá en el relato.Salvando laa distancias temporales y estilísticas, las imágenes que nos propone Gallego vienen a ser un giro de tuerca contemporáneo a los "Caprichos" goyescos. Una combinación perfecta de textos con vocación de inmortalidad y de ilustraciones de contenido e impacto difícilmente olvidables.